Los latinoamericanos son los nuevos europeos de este siglo

Por: Lester Burton
burton.lester@gmail.com

Cuando se habla de Barcelona la gente que está fuera de España suele relacionarnos con el Barsa FC o con las recordadas olimpiadas de 1992, sin embargo la Ciudad Condal (la segunda más grande de España) encierra más que un sueño deportivo. Estamos hablando de una ciudad en donde conviven personas de todas partes del mundo.
Cuando llegué a esta ciudad hace algunos años me llamó la atención ver que habían negocios que vendía productos especiales provenientes de Pakistan , Marruecos, Colombia, Bolivia, en fin , productos de todos los gustos y para todas las nacionalidades. Muy poca gente se imagina que en España hay más de 5 millones de extranjeros, de los cuales más un millón son latinos, en su mayoría de Ecuador, Bolivia, Perú, Colombia, República Dominicana, Argentina y Uruguay.
Estamos hablando de latinos que han llegado a Europa en busca de un sueño, muchos de los cuales dejaron atrás a sus familias para ganarse unos euros en este continente. Poco a poco muchos han echado raíces y se sienten integrados a la sociedad española, pero no olvidan que del otro lado del gran charco-como le llaman aquí al Océano Atlántico-existe una parte de su familia y su cultura que luchan día a día por mantener y conservar intactos.
Si nos ponemos a hacer comparaciones a la hora de emigrar nos damos cuenta que no es lo mismo partir a Estados Unidos que a Europa, veamos porqué: Cuando un inmigrante llega a Norteamérica tiene más facilidades por la distancia de mandar dinero a sus parientes en Latinoamérica, también tiene la posibilidad de enviar desde un teléfono celular hasta un automóvil si así lo desea, lo más probable es que no se gaste ni 500 dólares en mandar un contenedor a su país desde la Gran Nación del Norte.
En el caso de Europa la cosa es muy diferente ya que las comisiones por envío de dinero a América son carísimas, estamos hablando de entre 30 y 50 dólares por transferencia (al tipo de cambio del euro), a ello se suma la comisión que cobran en el país receptor, de manera que la mitad del dinero que se manda a los familiares se queda en a comisión.
En el caso del envío de objetos la cosa es mucho peor, y lo digo con conocimiento de causa, el envío de un teléfono celular desde España hasta Centroamérica tiene un costo de 150 dólares, como ven más que el mismo aparato. Y eso que hablamos de un paquete sumamente pequeño que apenas pesa 200 gramos. Se imaginan mandar una caja de 25 libras.
Esto ilustra en parte las situaciones que enfrentan los extranjeros latinos que están en Europa, un continente sumamente caro, pero que al final vale la pena porque al estar aquí te envuelve con ese misterio y encanto. Todo el que viene a Europa termina enamorado de este continente. Quizás no será tan colorido y cálido como el continente Americano, pero créanme, tiene muchas cosas lindas que se deben conocer antes de abandonar este mundo.